Llega el verano y, como todos los años, es el momento de prestar especial atención a nuestra piel. Durante esta época, exponemos de una manera más habitual nuestra dermis a los rayos solares, por lo que es importante darle la protección adecuada para mantenerla sana y evitar la futura aparición de problemas cutáneos. Si crees que un especialista debe revisar el estado de la piel, no dudes en pedir cita para un diagnóstico completo de la piel.
¡Cuida tu piel en verano con estos consejos!
Tabla de contenidos
Cómo cuidar la piel en verano
La exposición al sol, la brisa del mar o llevar ropa más corta puede provocar que la piel se vuelva seca o áspera. Darle los cuidados adecuados ayudará a que luzca perfecta durante todo el verano.
Una piel limpia
Mantener la piel limpia permite obtener un bronceado uniforme y conseguir que absorba mejor la vitamina D. Para ello, es imprescindible usar productos específicos que no alteren el ácido natural de la piel. En el caso del rostro, es crucial eliminar todo tipo de restos, como el maquillaje, con una loción suave, antes de exponerse durante un tiempo prolongado a los rayos del sol.
El agua da vida a la piel
La hidratación es uno de los aspectos fundamentales que no debemos descuidar en el cuidado de la piel. Es importante hidratar el organismo tanto por fuera como por dentro. Beber agua es esencial (dos litros diarios es el mínimo recomendado) y las duchas o baños ayudan a la hidratación exterior. Podemos complementar todo este proceso con el uso de cremas hidratantes tras la ducha. Debemos prestar especial atención a las zonas más secas, como los talones o las rodillas.
La ropa debe tener capacidad de transpiración
Un aspecto que en ocasiones pasa desapercibido es la ropa. En este sentido, hemos de elegir tejidos transpirables para evitar una sudoración excesiva que pueda derivar en algún tipo de reacción. Además, la vestimenta ayuda a cubrir las zonas más sensibles de la piel, como el cuello o el rostro. Para ello, lo más adecuado es utilizar gorros o fulares con el fin de evitar problemas en esa zona.
Siempre en compañía de la protección solar
La protección solar tiene que acompañarnos todo el año (con un mínimo de factor 15), pero en verano debemos prestar una especial atención. Es recomendable aumentar el factor de protección y aplicarlo a lo largo de todo el día. Uno de los errores más comunes que cometemos es restringirlo solo a la piscina o la playa. Si contamos con una piel especialmente sensible, podemos consultar a nuestro farmacéutico sobre la mejor opción de crema solar para nosotros.
En Farmacia Medrano Carrión contamos con una amplia selección de protectores solares para evitar que la piel pueda deteriorarse a lo largo del verano.
La alimentación es la clave
Una alimentación sana y equilibrada es básica durante todo el año, pero en verano hemos de añadir una mayor cantidad de ciertos alimentos. Frutas y verduras son alimentos ricos en antioxidantes que ayudan a estimular el flujo de la sangre en la piel. Los alimentos ricos en vitaminas son otra gran opción, ya que generan hidratación.
El tiempo al sol
Por muchas ganas que tengamos de ponernos morenos o estar bajo el sol, es importante vigilar el tiempo que nos exponemos. Es primordial evitar las horas centrales del día y contar con la posibilidad de estar a la sombra durante un rato. El equilibrio es fundamental para garantizar que la piel no pierda hidratación.
Los profesionales están para ayudar
Durante el periodo veraniego, es crucial vigilar la piel ante la aparición de manchas u otras anomalías de la dermis. En esos casos, hemos de acudir a un farmacéutico profesional para que pueda realizar una valoración y darnos una solución. Por último, no podemos olvidar que el consumo de alcohol y tabaco aumenta la degradación de las células de la piel.
Cuida tu piel este verano con estos consejos para mantenerla suave y brillante. Una rutina de cremas adecuadas para cada tipo de piel será el complemento perfecto a estos pequeños tips.